El número de explotaciones apícolas en el Estado español asciende a 32.845, lo que supone un aumento del 36% en el período 2010/2018. Estas explotaciones suman un total de 2.961.252 colmenas, lo que supone un incremento del 20% en el período 2008/2010. Los apicultores profesionales (aquellos cuyas explotaciones reúnen más de 150 colmenas) poseen el 18% de las explotaciones y el 80% de las colmenas.

Según datos de 2017, la producción de miel en el Estado español se sitúa en 29.392,2 toneladas y cada persona consume de media alrededor de 400gr al año. Respecto a la cera, se producen alrededor de 1.500 toneladas al año.

Fuentes

• El Sector Apícola en Cifras: Principales Indicadores económicos. Subdirección General de Productos Ganaderos (Mayo de 2019).

• Miel. Es un fluido dulce y viscoso producido por las abejas a partir del néctar de las flores, de secreciones de partes vivas de plantas o de excreciones de insectos chupadores de plantas. Las abejas recogen todo esto y lo descomponen a través de varias digestiones enzimáticas (masticación y regurgitación) en compuestos sencillos, mayormente glucosa y fructosa. A continuación depositan este producto sobre las celdas de los paneles de cera y lo deshidratan agitando sus alas. Una vez que han eliminado aproximadamente el 80% del agua, dan por terminado el proceso.
  Para atontar a las abejas y recoger su alimento se utilizan ahumadores, que llenan de humo toda la colmena, provocando desorientación y algunas muertes, y se sacan los panales, desarmando la estructura de la colmena (su casa) y aplastando abejas en el proceso.
• Polen. Es el elemento fecundante de las flores. Su intervención es vital en la alimentación de las abejas, ya que con él preparan una papilla que sirve de alimento a las larvas hasta su desarrollo.
• El polen se recoge de las patas de las obreras antes de que éstas lo introduzcan en la colmena. Para ello se coloca bloqueando la entrada un utensilio que tiene una rejilla a través de la cual tienen que pasar las obreras para entrar en la colmena. Al hacerlo, los granos de polen se les caen de las patas, pasando a un recipiente donde se acumula para recogerlo posteriormente. Este utensilio a menudo provoca que se les rompan las patas.
• Propóleo. Es una sustancia que obtienen las abejas de las yemas de los árboles y que luego procesan en la colmena, convirtiéndola en un potente antibiótico con el que cubren las paredes de la colmena, con el fin de combatir las bacterias, virus y hongos que puedan afectarla. Para obtenerlo se produce la rotura de la colmena, y la desprotección antibiótica natural con que la habían dotado.
• Jalea real. Es una sustancia segregada por las glándulas hipofaríngeas de la cabeza de abejas obreras jóvenes, de entre 5 y 15 días, que mezclan con secreciones estomacales y que sirve de alimento a todas las larvas durante los primeros tres días de vida. El método de producción de jalea real consiste en engañar a las abejas con celdas reales artificiales. Para conseguir este fin se elaboran varillas que contienen cupulitas que sirven de simuladores de celdas reales. En estas cúpulas se colocan larvas extraídas de celdas de abejas obreras que sirven de cebo para que las abejas las alimenten con jalea real. Estas varillas se ubican en marcos jaleros que se introducen en las colmenas. La tarea de transferencia consiste en extraer de las celdillas del panal las larvas con una aguja y trasladarlas hasta las cupulitas. La larva se encuentra en la celda sobre una gota de jalea real encorvada en forma de U. Hay que sacarla con la aguja tomándola y depositarla en la cupulita, para que la larva quede sobre la gota de ceben. Luego se introducen las varillas en las colmenas. Este proceso conlleva manipulación, con la consiguiente probabilidad de muerte de las larvas y las abejas adultas implicadas en el proceso.
• Apitoxina. Es el veneno secretado por las obreras de varias especies de abejas como medio de defensa ante predadores e individuos de su misma especie. Es necesaria la muerte de la abeja para su extracción. Se emplea de forma medicinal por sus propiedades analgésicas y antiinflamatorias.
• Cera. Se obtiene dentro de los panales de cera que las abejas construyen en el interior de sus colmenas. Esto implica la rotura de sus casas. Se utiliza para hacer velas, para encerar maderas, papel, telas y pieles como el cuero, como conservante e impermeabilizante, y por ello, desde la construcción de una cerilla, hasta la de un cartucho o munición en la industria militar. Es utilizada como material dieléctrico (no conduce la electricidad) en virtud de que es aislante. En cosmética, es utilizada en forma de cremas o de ungüentos y como depilatorio.

Fuentes

• Miel. Wikipedia.
• Polen. Wikipedia.
• Propóleo. Wikipedia.
• Jalea real. Wikipedia.
• Apitoxina. Wikipedia.
• Cera. Wikipedia.

Los monocultivos son cultivos especializados en una sola planta en una explotación agrícola, generalmente plantaciones grandes, sin rotación de cultivos ni períodos de barbecho. [1] Son increíblemente perjudiciales para los animales no humanos y para el medio ambiente por varios motivos. Por un lado, debido a la falta de diversidad de flora y fauna, muchos animales no humanos son incapaces de sobrevivir en ese hábitat; por otro lado, muchos otros, al no tener depredadores, se reproducen de forma descontrolada, lo que provoca que se utilicen grandes cantidades de pesticidas como el glifosato. [2]

Uno de los animales más afectados son las abejas, una especie necesaria para la polinización de dichos cultivos. En respuesta a este hecho, en lugar de apostar por unos cultivos más éticos, ha surgido la industria de los servicios de polinización, consistente en desplazar colmenas de abejas de un monocultivo a otro para que los polinicen. Hoy en día las grandes empresas apicultoras obtienen la mayor parte de sus beneficios mediante este servicio, en lugar de mediante la venta de miel o productos derivados. Estas abejas están obligadas a llevar dietas homogéneas, consistentes únicamente en néctar de uno o dos tipos de cultivo, lo que provoca una falta de nutrientes que las debilita y deteriora sus sistemas inmunológicos, volviéndolas propensas a todo tipo de enfermedades. A esto hay que sumarle que sus dos formas principales de alimentación (el polen y la miel) les son arrebatadas para comercializarlas para consumo humano, siendo sustituidas por siropes de azúcar, jarabes de maíz y tortas de soja, lo que las debilita aún más. Además, son obligadas a vivir entre pesticidas, no solo los que se utilizan en los propios monocultivos sino los que se colocan dentro de sus colmenas para combatir ciertos ácaros y otros insectos que las abejas están demasiado débiles para enfrentarse a ellos. Dada su pobre alimentación y propensión a sufrir enfermedades, son tratadas de forma habitual con antibióticos para prevenir las infecciones bacterianas.

Fuentes

• Allan Stromfeldt Christensen. Bee collapse is the result of their enslavement in industrial monocultures. The Ecologist (2015).
• Jaydene Lavallie. The colonial flight of the honey bee. Real People’s Media (2016).
• [1] Monocultivo. Wikipedia.
• [2] Glifosato: Informe de Greenpeace advierte efectos nocivos para la salud y el ambiente. Greenpeace.org.

La abeja europea (Apis mellifera), también conocida como abeja doméstica o abeja melífera, es una especie de himenóptero apócrito de la familia Apidae. Es la especie de abeja con mayor distribución en el mundo. Originaria de Europa, África y parte de Asia, fue introducida en América y Oceanía. Esta especie es un insecto social que vive en enjambres formados por tres clases de individuos: reina, obreras y zánganos. Sin embargo, la mayoría de las especies de abejas son solitarias, es decir, no forman enjambres.

Las abejas tienen un sistema de comunicación propio, que denominamos danza de la abeja: a través del baile y movimientos vibratorios las abejas indican la distancia y orientación con respecto al sol de la fuente de alimento.

Fuentes

• Anthophila. Wikipedia.